“El amor ya no es tema exclusivo de poetas, filósofos o novelistas. Hoy lo estudian científicos de muy diversas disciplinas y han llegado a una conclusión: la importancia que tiene todo lo que sucede en el inicio de la vida para desarrollar la capacidad de amar. Es fundamental no perturbar demasiado el parto para que madre e hijo puedan desarrollar ese amor.”
Michel Odent
La espera y la llegada de un hijo es uno de los momentos más excepcionales de la vida. El embarazo es un momento precioso, rico en emociones, rico en sensaciones y descubrimientos. Durante este tiempo de espera y esperanza , a la vez, se viven cambios y acontecimientos nuevos, tanto emocionales como físicos. Cambios algunos que nos hacen preguntarnos si todo esto será normal…
Pero, ¿cómo disfrutar plenamente de estas emociones, de esta multitud de cambios, de estas sensaciones tan sutiles? a través del conocimiento y la toma de conciencia de nuestro propio cuerpo.
Estar bien informada y comprender lo que pasa, conocer también los medios técnicos y las dificultades de la obstetricia moderna permite una armonía y una sinergia muy positiva con los profesionales del nacimiento y junto con el equipo que nos acompañará en el camino de la maternidad.
Es obvio que el embarazo conlleva múltiples cambios físicos necesarios para el desarrollo del proceso de gestación. Es muy recomendable realizar una preparación física de todas aquellas estructuras musculares implicadas en el embarazo, fundamentalmente los músculos del suelo pélvico y los músculos de la faja o cincha abdominal, con el objetivo de mantener su función de sostén y gestión de las presiones intra-abdominales, independientemente de los cambios que van a ir sufriendo.
Por otra parte, para algunas mujeres el parto es como un maratón, para otras como un sprint, pero siempre es como una prueba deportiva. Incluso con analgésicos se puede dar a luz sin dolor, pero no podemos dar a luz sin trabajo y sin esfuerzo.
Mantener nuestro abdomen, nuestro periné y nuestra postura en buena forma son herramientas que nos ayudarán antes, durante y después del parto, y que evitarán y reducirán las secuelas del parto.